La depilación láser es un tratamiento estético que utiliza luz láser para eliminar el pelo de forma permanente. Es un tratamiento seguro y eficaz, pero para que sea lo más efectivo posible, es importante seguir una serie de recomendaciones, como la depilación con cuchilla antes de la primera sesión.
El pelo tiene dos partes: la raíz y el tallo, la raíz es la parte que se encuentra dentro de la piel, y es la que contiene el folículo piloso; el tallo es la parte del pelo que sobresale de la piel.
El láser funciona dañando la raíz del pelo, para que el láser pueda dañar la raíz, es necesario que el pelo tenga un tamaño determinado, si el pelo es demasiado corto, el láser no podrá alcanzar la raíz.
Por eso, es importante depilarse con cuchilla antes de la primera sesión de depilación láser, de esta forma, el pelo tendrá el tamaño adecuado para que el láser pueda dañar la raíz y eliminar el pelo de forma permanente.
Además de la importancia del tamaño del pelo, también es importante que el folículo piloso esté expuesto. Si este está cubierto por la piel, el láser no podrá llegar a él.
La depilación con cuchilla es la mejor forma de exponer el folículo piloso, las cremas depilatorias, por ejemplo, no siempre son capaces de eliminar todo el pelo, y la cera puede dejar restos en la piel que pueden interferir con el tratamiento, afeitarse con cuchilla antes de la primera sesión de depilación láser no es simplemente un paso opcional, sino una parte fundamental del proceso, este paso maximiza la eficacia del tratamiento y contribuye a una experiencia más segura y cómoda.